Forma un círculo de velas doradas, utilizando todas las que quieras. Cinco velas es lo tradicional, pero siete es el número de la buena suerte lunar y nueve es el número de las musas, por lo que puedes elegir el número de velas que más te convenga.
En medio de este círculo, coloca una foto tuya o una muñeca que te represente, o bien traza el círculo y siéntate en el medio.
Enciende un poco de incienso de salvia o artemisa y deja que queme hasta que el ambiente se llene de su sagrado humo. Con tus brazos levantados hacia la Luna nueva o llena, pronuncia la siguiente oración:
"¡Yo os invoco, madre de la oscuridad!
¡Yo os invoco, madre de la noche!
Dejad que vuestros ángeles de la inspiración
abran mi corazón.
Dejad que
vuestros ángeles del valor
vuelen en mi interior.
Voy a construir una cuna dorada
para hacerle sitio al valor.
Voy a encender un fuego dorado
para animar al valor que hay en mi interior.
Colocaré mis manos en tu regazo
para que los bendigas y utilices.
Pondré mi corazón en tu regazo
para que tus benditas manos lo acaricien
y me hagan cada vez más fuerte
para llenar mi corazón de nobles propósitos.
Inanna, señora de la estrella vespertina,
estudia bien mis palabras.
Que el valor more en el interior de mi alma.
Igual que tú moras en ella.
Que el valor guíe mi alma y mi destino.
Haz que así sea.
Haz que así sea.
Haz que así sea".
¡Yo os invoco, madre de la noche!
Dejad que vuestros ángeles de la inspiración
abran mi corazón.
Dejad que
vuestros ángeles del valor
vuelen en mi interior.
Voy a construir una cuna dorada
para hacerle sitio al valor.
Voy a encender un fuego dorado
para animar al valor que hay en mi interior.
Colocaré mis manos en tu regazo
para que los bendigas y utilices.
Pondré mi corazón en tu regazo
para que tus benditas manos lo acaricien
y me hagan cada vez más fuerte
para llenar mi corazón de nobles propósitos.
Inanna, señora de la estrella vespertina,
estudia bien mis palabras.
Que el valor more en el interior de mi alma.
Igual que tú moras en ella.
Que el valor guíe mi alma y mi destino.
Haz que así sea.
Haz que así sea.
Haz que así sea".
Ahora puedes salir del círculo o retroceder hasta tu altar y apagar las velas con la punta de tus dedos. Repite este ritual durante tres, siete o nueve noches seguidas.
Hechizo lunar: Para la devoción.
Enciende una vela blanca con tu nombre escrito tres veces. Coloca una foto o imagen de la Diosa en tu altar y si quieres también puedes adornarlo con una rosa. Enciende algunas hierbas cuyo aroma te resulte agradable e inhálalo. El aroma de este incienso debe ser terrenal, intenso y delicioso. Luego di:
Repite este hechizo lunar todos los viernes o utilízalo como oración para los esbats.
Hechizo lunar: Para la devoción.
Enciende una vela blanca con tu nombre escrito tres veces. Coloca una foto o imagen de la Diosa en tu altar y si quieres también puedes adornarlo con una rosa. Enciende algunas hierbas cuyo aroma te resulte agradable e inhálalo. El aroma de este incienso debe ser terrenal, intenso y delicioso. Luego di:
"Mi señora parece tan maravillosa desde el cielo.
Mi señora de la Luna está radiante.
Yo me comprometo a servirla y a que todos la conozcan
La Señora de la estrella vespertina,
Ella cuida de todos los seres vivos,
y hace que se apresuren a buscar refugio.
Es la reina del cielo, la reina de las hadas.
Yo me convertiré en ella y ella se convertirá en mí"
Mi señora de la Luna está radiante.
Yo me comprometo a servirla y a que todos la conozcan
La Señora de la estrella vespertina,
Ella cuida de todos los seres vivos,
y hace que se apresuren a buscar refugio.
Es la reina del cielo, la reina de las hadas.
Yo me convertiré en ella y ella se convertirá en mí"
Repite este hechizo lunar todos los viernes o utilízalo como oración para los esbats.
Bibliografía: "La gran Madre Luna", de Zsuzsanna Budapest.
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